Desde sus inicios, la gama Galaxy S de Samsung ha sido un referente dentro del segmento de móviles Android, y por ende de todo el ecosistema móvil. Estos terminales se caracterizan por ofrecer un perfil técnico muy avanzado con prestaciones como procesadores potentes y pantallas amplias de gran calidad. La evolución de la gama alta de Samsung ha ido acorde a los avances tecnológicos de cada momento y si comparamos estos equipos podemos ver diferencias notables. Hacemos una comparación de los tres modelos más recientes de la gama Galaxy. En primer lugar tenemos al Samsung Galaxy S4, presentado hace apenas unas semanas; después tenemos el Samsung Galaxy S3, introducido en mayo de 2012; y por último el Samsung Galaxy S2 que pertenece a 2011.
Pantalla
La pantalla es un componente que ha ido evolucionando de forma notable con cada generación, tanto en tamaño como en resolución. El Samsung Galaxy S2 sale de fábrica con un panel Super AMOLED Plus (tiene un mayor número de subpíxeles) de 4,3 pulgadas en diagonal y 480 x 800 píxeles de resolución. La siguiente generación supuso un salto importante ya que equipa un panel Super AMOLED de 4,8 pulgadas, un tamaño mucho más amplio, y resolución HD (1.280 x 720 píxeles). Hace unas semanas Samsung desveló los detalles del Samsung Galaxy S4 y la pantalla es uno de sus puntos fuertes. El último modelo de la gama Galaxy S cuenta con un panel de nada menos que cinco pulgadas y resolución FullHD (1.920 x 1.080 píxeles), que es lo mismo que tienen la mayoría de televisores planos, casi nada.
Diseño
El diseño también ha ido cambiando con el paso del tiempo, aunque la diferencia más exagerada es el paso del Samsung Galaxy S2 al Samsung Galaxy S3. El modelo más antiguo tiene un diseño más serio y convencional, sus esquinas son bastante rectas y su aspecto resulta más serio. Con la llegada del Samsung Galaxy S3 la compañía dio un lavado de cara y apostó por un diseño más innovador en el que predominan las líneas suaves y redondeadas. Esta nueva apariencia tiene un toque más distintivo que se sale de los estándares habituales y ya se identifica con productos Samsung. El modelo más reciente continúa con la misma línea de diseño inspirada en la naturaleza, pero se han cuidado más los detalles para que el resultado sea más suave y pulido. El tamaño del Samsung Galaxy S3 y el Galaxy S4 es muy similar, aunque el Galaxy S4 es más delgado y su forma queda más estilizada. El Samsung Galaxy S2 es el más pequeño de los tres porque su pantalla es más reducida, en consecuencia también es el más ligero. A pesar de las diferencias estéticas, los tres modelos cuentan con los mismos controles. En el frontal está la tecla física de inicio, flanqueada por dos botones capacitivos para retroceder o abrir el menú. En los laterales se encuentran el botón de encendido-reposo y el control de volumen.
Cámara de fotos
Tanto el Samsung Galaxy S2 como el Samsung Galaxy S3 tienen una cámara de ocho megapíxeles, no obstante hay diferencias que vale la pena destacar y que juegan a favor del modelo más nuevo. El sensor del Samsung Galaxy S3 viene con tecnología BSI, un sistema de iluminación posterior que ofrece muy buenos resultados al hacer fotos en condiciones de poca luz. Además también tiene nuevas funciones como el disparo en ráfaga más rápido o la opción Best Photo que selecciona la mejor imagen de una serie de forma automática. Por otro lado el Samsung Galaxy S4 ha dado un salto en cuanto a resolución. Integra un sensor, también BSI, de trece megapíxeles y las imágenes resultantes tienen un tamaño mucho mayor. Además el último buque insignia de la marca coreana también cuenta con varias funciones exclusivas como Dual Camera, Sound & Shot o Drama Shot. Los tres equipan flash LED, enfoque automático, geo-etiquetado, detector de caras, graban vídeos FullHD y tienen cámara frontal para videollamadas.
Potencia
Ya lo decíamos en la entrada, la potencia es uno de los puntos fuertes de los terminales de la gama Galaxy S. El Samsung Galaxy S2 ya sorprendió en su día con un procesador de doble núcleo a 1,2 gigahercios y que viene acompañado por 1 Gb de memoria RAM. Un año después Samsung dio otra vuelta de tuerca con el Samsung Galaxy S3, en este caso apostaron por un innovador chip de cuatro núcleos a 1,4 gigahercios, que en aquel momento era lo más potente que se podría encontrar en un smartphone (también lo apoyaba 1 Gb de memoria RAM). Con la última generación Samsung ha seguido innovando en materia de potencia colocando un procesador de nada menos que ocho núcleos, aunque para ser exactos se trata de una combinación de dos chips quad-core que trabajan conjuntamente para ahorrar batería. El Samsung Galaxy S4 también estará disponible en una versión con procesador de cuatro núcleos, concretamente un Snapdragon 600. Cualquiera de los dos procesadores del Samsung Galaxy S4 ha dado resultados excelentes en las pruebas Benchmark.
Funciones exclusivas
Hasta la llegada del Samsung Galaxy S3, Samsung se había centrado sobre todo en ofrecer un perfil técnico muy puntero con los terminales de su gama alta. Sin embargo con el Samsung Galaxy S3 dieron un giro a esta estrategia y comenzaron a apostar por una serie de funciones de software enfocadas a mejorar la experiencia de uso, sin duda todo un acierto. Con este tipo de características Samsung consigue desmarcarse de sus competidores al ofrecer un valor exclusivo que no se puede encontrar en otros terminales. El Samsung Galaxy S3 cuenta con prestaciones como Smart Stay, que detecta nuestra mirada para mantener la pantalla activa, o Pop up Play para ver vídeos en una ventana flotante. El Samsung Galaxy S4 ha continuado esta tendencia ampliando todavía más las capacidades con Air View y Air Gesture o Smart Pause.
Conclusiones
Con cada nuevo integrante de la familia Galaxy S, Samsung ha demostrado estar a la vanguardia de la telefonía ofreciendo un dispositivo muy completo y con lo último en componentes. El Samsung Galaxy S2 fue un móvil muy completo en su momento pero ahora se ha quedado un poco descolgado, ya que el salto entre éste y el Samsung Galaxy S3 es enorme. El Galaxy S3 comenzó el camino en el que ahora se encuentra el Samsung Galaxy S4, el de un smartphone que combina un perfil técnico muy completo pero sin dejar a un lado las funciones de software.
Ficha comparativa
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